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Punto Gatillo del Piramidal: 5 errores que debe evitar tu clínica

El tratamiento del punto gatillo del piramidal es una intervención terapéutica de alto valor para clínicas y profesionales que buscan optimizar resultados en pacientes con dolor glúteo o ciático no radicular.
Diseñada para clínicas que buscan un enfoque resolutivo y actualizado, esta guía no solo proporciona técnicas eficaces para el tratamiento del músculo piramidal, sino que también analiza los principales errores que se cometen en consultas, ayudándote a mejorar resultados y posicionar tu servicio como un referente en fisioterapia avanzada.
¿Qué es el Punto Gatillo del Piramidal y cómo se identifica?

El punto gatillo del piramidal es una disfunción miofascial frecuente en pacientes con dolor glúteo profundo o irradiado hacia la pierna. Este punto hipersensible se localiza en el músculo piramidal (también llamado piriforme), situado en la región posterior de la pelvis, y puede desencadenar síntomas similares a los del síndrome del piriforme o incluso una falsa ciática.
En el ámbito clínico, su identificación es clave para el tratamiento de patologías que pueden comprometer la movilidad, producir dolor al sentarse o caminar, e incluso provocar compresión del nervio ciático.
El punto gatillo del piramidal es una zona hiperactiva dentro del músculo que suele ser la causa directa de la contractura del piramidal. Esta contractura genera dolor profundo y puede imitar una falsa ciática.
Para identificarlo, el fisioterapeuta debe realizar una palpación profunda entre el sacro y el trocánter mayor del fémur, donde la presión sobre el punto gatillo reproduce el dolor referido y puede provocar un espasmo local. Además, pruebas como el test de FAIR (flexión, aducción y rotación interna de la cadera) pueden ayudar a confirmar la implicación del músculo piramidal en el cuadro doloroso.
Beneficios de tratar correctamente el Punto Gatillo del Piramidal en tu consulta

Aplicar técnicas efectivas sobre este punto puede suponer un cambio significativo en la evolución del paciente. Algunos beneficios clínicos:
- Alivio inmediato del dolor glúteo irradiado
- Mejora de la movilidad pélvica y lumbar
- Reducción de la presión sobre el nervio ciático
- Prevención de recaídas en deportistas y pacientes crónicos
- Aumento de la eficacia de programas de readaptación funcional
¿Cómo reconocer una Contractura Piramidal de un paciente?
Tal y como hemos dicho previamente, el punto gatillo del piramidal suele ser la causa directa del dolor profundo o indirecto si es irradiado en forma de ciática (comprime al nervio ciático que es el que provoca esa irradiación). Reconocer esta contractura en consulta requiere una combinación de anamnesis detallada, palpación clínica y pruebas ortopédicas específicas. El paciente suele presentar dolor profundo en la región glútea, que puede irradiarse hacia la parte posterior del muslo, simulando una ciática, aunque sin signos neurológicos asociados (como pérdida de fuerza o reflejos). A menudo refiere empeoramiento del dolor al estar sentado por períodos prolongados, al subir escaleras o al cruzar las piernas.
Durante la exploración física, se puede detectar tensión y dolor a la palpación profunda entre el sacro y el trocánter mayor, donde se localiza el piramidal. La presión sobre el punto gatillo puede reproducir el dolor irradiado. Además, el test de FAIR (flexión, aducción y rotación interna de cadera en decúbito lateral) suele resultar positivo, provocando dolor glúteo por compresión del músculo sobre el nervio ciático.
La contractura también puede limitar la rotación interna de la cadera y provocar molestias al realizar movimientos que estiran el músculo. Un diagnóstico preciso se apoya en descartar otras causas de ciatalgia y confirmar la implicación miofascial mediante la exploración detallada.
5 técnicas efectivas para tratar el Punto Gatillo del Piramidal
A nivel profesional, el tratamiento del punto gatillo del piramidal debe realizarse con herramientas precisas y técnicas avanzadas. Las más recomendadas son:
1. Punción seca ecoguiada
La punción seca ecoguiada permite localizar con exactitud el punto gatillo dentro del músculo piramidal y desactivarlo mediante una estimulación mecánica directa. El uso del ecógrafo garantiza precisión anatómica, minimiza riesgos y optimiza los resultados en pacientes con dolor persistente o recidivante.
- Técnica invasiva altamente efectiva.
- Permite desactivar el punto gatillo con máxima precisión.
- Especialmente útil en casos crónicos o resistentes.
2. Electroacupuntura del piramidal
Esta técnica combina los beneficios de la acupuntura con la estimulación eléctrica transcutánea, logrando un efecto relajante profundo sobre el músculo piramidal. Está especialmente indicada en casos de contractura severa o cuando se requiere una modulación más intensa del dolor neuropático.
- Consiste en insertar agujas en el músculo y aplicar una corriente eléctrica de baja frecuencia.
- Ayuda a liberar tensiones profundas y a modular el dolor.
3. Neuromodulación percutánea
Permite influir directamente sobre la conducción nerviosa y el control motor a través de impulsos eléctricos finamente dosificados. Es ideal para tratar la sensibilización del nervio ciático provocada por el piramidal y mejorar el patrón neuromuscular de activación.
- Estimulación eléctrica sobre el nervio ciático o el plexo sacro mediante agujas.
- Técnica avanzada ideal para clínicas que integran tecnología de última generación.
4. Terapia manual profunda
La terapia manual bien aplicada sobre el músculo piramidal permite liberar restricciones miofasciales, disminuir la tensión muscular y mejorar la vascularización local. Suele ser una primera opción en el abordaje conservador y un excelente complemento para intervenciones invasivas.
- Compresiones isquémicas, técnicas de liberación miofascial o masaje transverso profundo.
- Puede combinarse con tratamiento invasivo para resultados más duraderos.
5. Estiramientos guiados del piramidal
El estiramiento activo y progresivo del piramidal ayuda a mantener la funcionalidad del músculo tras la desactivación del punto gatillo. También previene nuevas contracturas y mejora la movilidad de la cadera, siendo una fase esencial dentro del plan de recuperación funcional.
- Intervención complementaria imprescindible para mejorar la elasticidad muscular.
- Parte clave de la pauta de reeducación postural.
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Materiales recomendados para clínicas
Para implementar con éxito el tratamiento del punto gatillo del piramidal, una clínica debe disponer de:
- Agujas para punción seca (diversos calibres y marcas certificadas) – Indispensables para desactivar el punto gatillo del piramidal con precisión y eficacia en contracturas profundas.
- Dispositivo de electroacupuntura o neuromodulación (con conexión para electrodos de aguja) – Ideal para tratar contracturas piramidales complejas mediante estimulación eléctrica del músculo y del nervio ciático.
- Ecógrafo portátil o de sobremesa (para localización ecoguiada) – Fundamental para localizar con exactitud el punto gatillo del piramidal y guiar intervenciones seguras en una zona anatómica profunda.
- Camilla ajustable con acceso lateral para abordaje glúteo – Permite un abordaje cómodo y seguro del músculo piramidal en tratamientos manuales e invasivos.
- Gel conductor para uso ecográfico – Mejora la calidad de imagen en ecografía, facilitando la identificación del piramidal y su punto gatillo.
- Guantes, antiséptico y contenedores de agujas – Garantizan un entorno estéril y seguro al aplicar técnicas invasivas en la zona glútea.
- Cartelería anatómica del músculo piramidal (educación al paciente) – Herramienta educativa para explicar al paciente qué es el punto gatillo del piramidal y por qué causa su contractura.
5 errores comunes al tratar el Músculo Piramidal en clínicas

El abordaje del músculo piramidal puede parecer simple, pero en la práctica clínica es fácil caer en errores que comprometen el diagnóstico o la eficacia del tratamiento. Estos son algunos de los fallos más habituales:
1. Confundir el punto gatillo del piramidal con una ciática verdadera
Es frecuente atribuir el dolor irradiado en glúteo y pierna a una hernia discal sin descartar antes una contractura piramidal o síndrome del piriforme. Esto retrasa el tratamiento adecuado.
2. No identificar correctamente el punto gatillo
El piramidal es un músculo profundo y pequeño. Abordarlo sin un buen conocimiento anatómico o sin ecografía puede llevar a una punción ineficaz o incluso riesgosa.
3. Aplicar solo tratamiento superficial
Masaje o estiramientos pasivos pueden aliviar temporalmente, pero no desactivan el punto gatillo. Es necesario combinar técnicas invasivas o profundas para resolver la disfunción de raíz.
4. No considerar la relación con el nervio ciático
En muchos casos, el piramidal comprime el nervio ciático. Ignorar esta interacción puede hacer que el paciente no mejore o incluso empeore con ciertas técnicas.
5. Tratar el músculo sin reeducar el movimiento
Una vez resuelta la contractura, no corregir el patrón de activación muscular o no trabajar la movilidad pélvica puede provocar recaídas.
Conclusiones desde Agupunt
El punto gatillo del piramidal representa una causa frecuente pero a menudo infradiagnosticada de dolor glúteo y falso ciático. Su tratamiento adecuado puede marcar una gran diferencia en la evolución funcional del paciente y en la calidad de los servicios que ofrece tu clínica.
Contar con el material adecuado es esencial, pero igual de importante es evitar errores comunes como confundir el diagnóstico, aplicar tratamientos insuficientes o de manera incorrecta o no considerar la relación con el nervio ciático.
Dominar el tratamiento del punto gatillo del piramidal permite ofrecer un enfoque resolutivo, seguro y diferencial frente a las contracturas piramidales, posicionando tu clínica como un referente en fisioterapia avanzada y favoreciendo la fidelización del paciente a medio y largo plazo.